lunes, 29 de abril de 2013

LA DIFERENCIA ENTRE HACER CARDIO Y QUEMAR GRASA

Son las máquinas más peleadas por todos al inicio o final de la rutina, y peor si hay pocas en tu gym, porque entonces se forman colas interminables para usarlas y el que se queda más de 20 minutos termina siendo la persona más odiada por todos los que están esperando su turno. Sí, son esas máquinas: elíptica, bicicleta, faja, escaladora, que cuando te subes quieres ponerlas a máxima velocidad y terminar empapado de sudor, exhausto pero feliz porque ya quemaste el postrecito del almuerzo.

En tu mente solo está una cosa: más velocidad = más sudor = más calorías quemadas = menos grasa = menos panza = mejor cuerpo = VACACIONES 2013.

Pero esta no es la mejor ecuación de todas.. hay una diferencia entre hacer cardio y quemar grasa. El ejercicio cardiovascular o ejercicio aeróbico es un tipo de ejercicio que requiere el movimiento de grandes grupos musculares durante un periodo mantenido de tiempo, el cual eleva tu ritmo cardíaco a un mínimo del 50% de tu Frecuencia Cardíaca Máxima. Aunque ambos son ejercicios cardiovasculares, la diferencia está en el nivel de elevación de tu FCM. Son dos zonas de trabajo distintas, inclusive así te lo indica los colorcitos de la máquina a la que te subes cuando escoges el programa. La confusión se da porque la mayoría cree que sudar es sinónimo de quemar grasa, cuando no es así. El sudor es simplemente la manera en que tu cuerpo auto regula su propia temperatura, tu aire acondicionado natural por así decirlo, y lo único que pierdes en ese momento es agua.
Veamos qué significa cada zona de trabajo y que beneficios te trae según tus objetivos:
1. La Zona Cardio.- En esta zona trabajarás a un nivel intenso, ya que mantiene tu ritmo cardíaco elevado entre el 70-80% de tu Frecuencia Cardíaca Máxima (FCM).
La fórmula tradicional para saber cuál es tu FCM es la siguiente:

Frecuencia Cardiaca Máxima = 220 – (tu edad en años), y si a eso le sacas el 70 - 80% tendrás tus pulsaciones para ejercicio cardiovascular intenso.
Ejemplo para una persona de 30 años: 
220- 30 = 190 * 80% = 152 pulsaciones por minuto.
Durante este tipo de entrenamiento, tu cuerpo utiliza carbohidratos como la principal fuente de energía. Este es el tipo de ejercicio que, como su nombre lo dice, te ayudará a mejorar tu capacidad cardiopulmonar: más capacidad de oxigenación, más resistencia cardíaca,  mejora tu pulso, aumenta tu metabolismo, mejora tus articulaciones, mejora tus niveles de colesterol y reduce tus niveles de stress. Hacer más ejercicio de este tipo mejora tu resistencia y puede marcar la diferente entre correr 5 cuadras y morirte en el intento o seguir hasta completar la vuelta al Pentagonito y terminar fresco como lechuga.  El tema aquí es que durante este ejercicio no estás quemando grasa, lo que quemas en el instante son calorías provenientes en su mayoría de los carbohidratos, ya que al ser un ejercicio explosivo requiere de un sustrato energético de rápida disponibilidad. Y si quieres que realmente haga efecto en tu cuerpo es solo cuestión de matemáticas:  
menos calorías consumidas + mayor gasto calórico = pérdida de peso = ÉXITO !
2. La Zona Quema Grasa.- Este también es un ejercicio cardiovascular, pero debido a que la intensidad de este ejercicio es baja, lo debes realizar por mucho más tiempo para que haga su efecto, que sucede aproximadamente a los 40 minutos de empezado el ejercicio. Las pulsaciones deberán mantenerse entre el 60 - 70 % de tu FCM.
Utilizando el ejemplo de alguien de 30 años:  
220 - 30= 190 * 70% = 133 pulsaciones por minuto.
Se dice que este ejercicio "quema" grasa pero en realidad lo que hace tu organismo es oxidar las grasas mediante un proceso metabólico lento para transformarla en energía. Esta grasa proviene en parte también de tus reservas: rollos, panza, llantas y todo eso que quieres desaparecer.
Este entrenamiento de baja intensidad se recomienda para los que están con sobrepeso o no están acostumbrados al ejercicio. Es importante construir una base aeróbica antes de pasar al entrenamiento de alta intensidad.


¿Y cuál es la diferencia entonces?
La diferencia está en que si quieres perder peso es más importante tener en cuenta la cantidad de calorías quemadas durante el entrenamiento frente a la cantidad de grasa utilizada.
Ambas zonas están diseñadas para mantener tu ritmo cardíaco dentro de tu rango objetivo. La cantidad de calorías que quemas está directamente relacionada con la intensidad del ejercicio. En realidad el cuerpo utiliza la grasa como fuente primaria de combustible durante el ejercicio de baja intensidad. Alrededor del 60 % de las calorías quemadas provienen de la grasa, pero para la pérdida de grasa en general, lo que más importa es la diferencia entre el número de calorías que gastas y el número de calorías que consumes de tus alimentos.

Independientemente de la zona en que te encuentres, en ambas igual llegarás a tu objetivo de reducción de peso. Sin embargo la zona cardio te ayudará a quemar más calorías en corto tiempo debido a su intensidad. Si tu objetivo es solo la pérdida de peso, en realidad es indistinto quemar calorías provenientes de los carbohidratos o de las grasas. Así que enfócate directamente en hacer que tus entrenamientos sean un verdadero reto, un mínimo de 25 minutos a una hora dependiendo de la zona aeróbica. Y recuerda finalmente que más importante que tu actividad física, deberás llevar un adecuado plan de alimentación que lo complemente.