La importancia que tiene un buen desayuno marca la diferencia del resultado de nuestra jornada del día.
Son muchos los estudios realizados en cuánto al cumplimiento de esta primera comida del día pero es increíble como muchas personas lo siguen dejando de lado sin darse cuenta de las consecuencias, la población más susceptible son los niños ya que están en etapa de formación de pautas alimentarías, etapa de crecimiento y de aprendizaje. No obstante el romper con el ayuno en las primeras horas del día es necesario en todas las edades.
Siempre nos hacemos la cabeza que deseamos dormir más, saltamos con un pie de la cama a la ducha y al auto y nos ponemos a trabajar y luego llegamos a la media mañana tragando lo primero que encontramos y luego sigue el picoteo hasta que llegamos al medio día con un hambre voraz.
Estudios científicos han comprobado que la mayoría de las personas que tienen sobrepeso y obesidad y hasta podríamos incluir el factor depresión son personas que obvian el desayuno o lo realizan en forma incompleta con esto me refiero a tomar un café o un jugo y dispararse a las labores cotidianas.
La relación existente es la siguiente:
Venimos de haber consumido la última comida que fue la cena y han pasado como más de 12 hs. de ayuno, y esto se vuelve aun peor en personas que obvian las cenas por querer bajar de peso.
Que es lo que ocurre a nivel metabólico por no romper este ayuno:
- El metabolismo se vuelve más lento debido a que la falta de glucosa obliga al cuerpo a buscar energía de otra fuente y la primera opción será el metabolismo de las proteínas las cuales liberarán aminoácidos es decir empezamos a utilizar nuestra masa muscular la cual necesitamos para quemar nuestra grasa. Por lo tanto aparte de tener pocas energías para empezar el día, todo el esfuerzo que hagamos para mantenernos en forma nos costará el doble.
- Las reservas de energía corporal se retienen por estar en estado de alerta ya que el cuerpo no recibe nutrientes, a lo que quiero apuntar es que dejando de desayunar no perderemos peso de forma saludable lo único que perdemos es masa muscular fomentando a que nuestro cuerpo quede flácido acompañado de la formación de celulitis. Lo peor de todo es que cuando lleguemos al medio día nuestro almuerzo será en exceso y este exceso será depositando como grasa promoviendo al aumento de peso.
- Disminuye la secreción de la insulina, el cuerpo recurre a movilizar las reservas de grasa para obtener combustible y esto viene acompañado de cuerpos cetónicos los cuales terminarán en producir una acidosis.
- Aumento del cortisol y las catecolaminas las mismas son liberadas porque el cuerpo empieza a entrar en un estado de estrés. El aumento de los niveles de cortisol actúan a nivel físico disminuyendo la fuerza para realizar actividades, aumenta el cansancio ante actividades mínimas, caemos ante dolores de cabeza, dolores musculares, aumento de la presión arterial y aumento de palpitaciones ante ejercicios leves. También disminuyen las defensas del organismo nivel de estado anímico los niveles aumentados de cortisol crean una personalidad irritante, con sentimientos de depresión e ira.
- El cerebro trabaja lentamente porque no tiene glucosa en el torrente sanguíneo, esto afecta las funciones cognoscitivas disminuyendo la capacidad de relacionar una información y recordarla con facilidad, dificulta el poder de estar atentos a las informaciones e interfiere con la fluidez verbal.
- El estado anímico disminuye por la falta de hidratos de carbono, comenzamos con el deseo de comer alimentos ricos en azúcares hasta que nos abalanzamos sobre los mismos y experimentamos una alegría al saborearlos pero este estado en poco tiempo irá decayendo en la ansiedad de buscar más azúcar.
Considerando todos estos aspectos es más que fundamental que la influencia que tiene un buen desayuno en todas las etapas de la vida actuará de manera beneficiosa en nuestro estado psíquico, nutricional y físico.
Así es que valdrá la pena despertar unos minutos más temprano y disfrutar de un delicioso desayuno equilibrado y variado con todos los macro y micro nutrientes necesarios.
Al fin y al cabo es solo cuestión de acostumbrarnos e implementar una forma más de cambiar nuestro hábito de vida en pro del bienestar general.